Si eres un lector habitual, es posible que más de una vez te hayas quedado sorprendido con el precio de venta de un libro. ¿Cómo puede ser que un libro estándar de tapa blanda llegue a costar normalmente 20€? Mucha gente, sin conocer los entresijos del mundo editorial, ya considera esto como un desaliento para dejar el libro de nuevo en la estantería.
Sin embargo, si nos detenemos a mirar en qué se va toda esa cantidad de dinero, se puede llegar a entender cómo detrás del PVP de un libro hay todo un arsenal de gastos y reparticiones. Es por eso que, ya seas lector o futuro autor, en este artículo vamos a desglosar el precio de venta de un libro y todos los métodos para poder fijarlo.
Presupuesto para la impresión de un libro
Un libro no solo consiste en terminar un manuscrito, llevarlo a la imprenta y repartirlo por las librerías. Detrás de cada ejemplar hay todo un trabajo de producción donde se involucran una gran cantidad de profesionales y, como podrás imaginar, todo ello tiene un coste.
“De los diversos instrumentos inventados por el hombre, el más asombroso es el libro; todos los demás son extensiones de su cuerpo… Sólo el libro es una extensión de la imaginación y la memoria”.
Hay varias formas de editar un libro; desde las plataformas de autoedición como Coollibri, hasta la coedición. Sin embargo, para poder entender de forma completa todos los posibles costes que se pueden presentar, vamos a usar la edición tradicional para desglosar los costes y el presupuesto que tienen que ir involucrados en el precio de venta de un libro.
Derechos de autor
Cuando se ve el PVP de un libro ya expuesto en las librerías, debes saber que un porcentaje de éste va destinado al autor. Esto parece obvio pero lo cierto es que el autor sólo acaba llevándose un 10% de las ganancias de su libro ya que cede los derechos de autor o regalías a la editorial. Aún así, dentro de sus ganancias, también se incluye un generoso anticipo que la editorial debe poder costear, en parte, con un precio de venta competente.
Costes de la editorial
Puede que, desde el punto de vista externo, parezca que las editoriales se aprovechan del talento de los autores al dejarles solo el 10%. Sin embargo, no hay que obviar que las editoriales son negocios y que los libros son su medio de comercio. Es por eso que su objetivo es poder transformar el manuscrito de un escritor en un producto vendible y apreciado por el público.
Para ello, no solo se encargan de toda la labor organizativa y comunicativa con el resto de participantes como la imprenta, los distribuidores, los libreros o la parte legal, sino que además ponen en marcha el desarrollo del libro realizando correcciones, diseños de portadas, maquetaciones, encuadernaciones, elección de formatos; en definitiva, dan forma a lo que será el futuro libro y, como imaginarás, todo eso tiene unos costes.
Gastos fijos de un libro
Además de los gastos destinados al autor y a la labor de producción de las editoriales, a la hora de fijar el precio de venta de un libro también se deben valorar todos los gastos fijos que va a tener que tener.
Con esto nos referimos a factores imprescindibles para la producción que, normalmente, siempre tiene un coste parecido; tipo de encuadernación, formato de libro de bolsillo, diseño de portada, uso de ilustraciones, trámites legales y asignación de ISBN, etc.
Gastos variables de un libro
En cuanto al resto de gastos a tener en cuenta, entrarían los que están directamente relacionados con el trabajo de imprenta y que, en este caso, varían. Dependiendo del número de copias, el tipo de papel a usar, el tipo de gramaje o el tamaño del libro el precio podría variar.
Cómo fijar el precio de un libro
Como habrás podido comprobar, un libro trae consigo muchos gastos y factores a tener en cuenta que luego, inevitablemente, deberán estar reflejados en el precio de venta. Finalmente, el libro debe resultar un producto rentable para que pueda salir al mercado y se pueda llegar a retribuir el esfuerzo de todas las partes.
Sin embargo, cada proyecto editorial es un mundo y es por eso que a lo largo del desarrollo de los grandes sellos editoriales, se han creado diferentes métodos para fijar el precio de un libro. A continuación, vamos a comentar los cinco principales en orden de relevancia.
Escandallo editorial
El escandallo se basa en la teoría del valor como costo de producciones y es uno de los recursos que más se suelen usar en grandes editoriales ya que es la forma más fiable de saber si un libro va a generar la rentabilidad que se espera. En resumidas cuentas, un escandallo es la suma de todos los posibles costes de producción de un libro en concreto, por lo que se consigue una cifra que, posteriormente, habrá que decidirse entre el número de ejemplares, dando un PVP.
En el escandallo se tiene en cuenta todos los costes variables y fijos, así como los derechos de autor, los porcentajes de entre el 5% y el 10% a la editorial y toda la parte externa de costes a la imprenta. Por ejemplo, pongamos que la suma de 4.000 ejemplares de un libro tiene unos costes de producción de 10.000 euros; el escandallo nos determina, al dividir ambas cifras, que el coste de producción de ese libro es de 2,50€ por unidad. A todo esto, se le debe sumar la parte proporcional de la distribuidora, la librería, el marketing y promoción y la parte legal, pudiendo llegar a un PVP de unos 15€.
Fórmula de coste editorial
Además del escandallo editorial, hay otra forma complementaria de poder fijar un precio de venta rentable y asequible para el libro y es usando una fórmula que ya contempla todos los gastos posteriores al escandallo. Normalmente, las editoriales usan la cifra de 4 o 5, que será el número por el que se multiplique el coste de escandallo para cubrir gastos
Sin embargo, algunas grandes editoriales que hacen grandes tirajes de hasta 15.000 copias, se aseguran multiplicando por 6 aunque esto aumente el precio de venta. De este modo, con el ejemplo anterior, tendríamos que un libro con un coste básico de 2,5€, al multiplicarse por 5, daría un total de 12,50€ y, si fuera por 6, de 15€. Dentro de ese PVP van todos los costes adicionales y se asegura que todo el mundo que ha intervenido en el libro se lleve su parte.
Aun así, hay que tener en cuenta que estas cifras que se ponen sobre el papel están pensadas sobre estimaciones y probabilidades. Lo cierto es que muchos libros acaban sin vender y devueltos al almacén por lo que es recomendable multiplicar siempre por 6 para poder tener un margen de error.
Autoedición de libro
Si no se quiere estar esperando a que una editorial llame a la puerta o, por el contrario, no quieres tener que involucrar a tanta gente y fragmentar tanto el precio de un libro, siempre puedes optar por la autoedición o, en su defecto, la coedición. En estos formatos nuevos y autogestionados de edición, los porcentajes de gastos son mucho más sencillos, y las ganancias más elevadas.
Normalmente, la mayoría de los beneficios irán para el autor y una parte proporcional para la editorial o la plataforma de autoedición que te ayudará con toda la parte más técnica de producción. Sí es cierto que con esta vía, la venta en masas puede costar un poco más al principio, pero con un buen plan de ventas, será mucho más rápido recuperar lo invertido y comenzar a ver los beneficios y bienes.
En este caso, el precio de venta tiene que venir condicionado por el capital que se ha tenido que invertir por parte del autor y la editorial.
Precio por imitación
Si no contamos con una gran editorial y nos estamos enfocando en poder fijar nosotros mismos como autores el precio de venta de nuestro libro, es normal que estemos un poco desorientados en cuanto a cuál será un precio adecuado para el público y rentable para nosotros. En este caso, una alternativa es hacerlo por imitación.
Para ello, deberás hacer un estudio con toda la información de los libros que hay en el mercado de un perfil parecido, con un autor del mismo renombre, una temática similar y unos canales de venta compartidos. De este modo, estarás haciendo acopio de un estudio de costes previo, claro que no es tan fiable.
Precio por intuición
La última alternativa para fijar el precio de venta, y desde nuestro punto de vista la menos aconsejable, es la de la intuición. Como lectores férreos, es normal que tengas en tu cabeza un cierto baremo de precios en cuanto a si se trata de un libro de bolsillo, una encuadernación en cartoné o un libro ilustrado. Esto puede ser una orientación a la hora de poder dar un precio al libro.
Sin embargo, con este método no habrá ningún tipo de garantía ni seguridad de que el precio sea acorde a su producción y pueden llegar a ocurrir dos escenarios; o que el precio sea elevado y no consiga apenas compradores, o que no sea una cantidad suficiente y no puedas cubrir gastos.
Precio de un libro electrónico o audiolibro
Hasta ahora estábamos hablando del precio de ventas de un libro impreso ya que, a pesar de todo, es uno de los que más ventas sigue recaudando al cabo del año. Sin embargo, no se debe obviar que el libro electrónico y el audiolibro se están haciendo un gran hueco dentro de la industria de la literatura y los textos narrativos.
La cultura busca estar siempre al tanto de las herramientas que brindan las nuevas tecnologías y esto también trae consigo cambios. Por un tema básico de infraestructuras, un libro electrónico siempre va a resultar más barato, ya que los costes de imprenta, distribución y librerías desaparecen. En compensación, aparecen precios desde las plataformas digitales en forma de catálogos o bibliotecas online y también por parte de los maquetadores, que deben de adaptar la versión digital e incluso hacerlo interactivo.
Normalmente, se suele tomar el PVP de un libro impreso y tomar únicamente el 40%. Así, un libro impreso de PVP en 20€, pasará a costar 8€.
Como saber si un libro es valioso
Es normal que te surjan dudas si estás en el camino de publicar un libro. A menudo, el mundo literario tiene un aura de misterio y de romanticismo en torno a la figura del escritor, su vida bohemia y su éxito tardío. Sin embargo, no debes olvidar que hoy en día el ambiente editorial es un negocio, y está medido en milímetros por número y porcentajes.
Normalmente, son las editoriales las que se encargan de determinar si un libro tiene valor o no, no tanto en cuanto al talento de un escritor, sino de la trascendencia de su obra en el momento actual. Este escrutinio literario convierte la apuesta en algo más seguro.
Aún así, no siempre tiene que ser una editorial la que interceda en tu pasión. Gracias a la autoedición, en plataformas como Coollibri puedes imprimir tu libro y darle salida. Para ello, lo mejor es poder crear previamente una comunidad de seguidores y lectores que aseguren una buena acogida. Puede repasar estas recetas para tener un libro exitoso.
El negocio del precio de un libro a tu alcance
Publicar tu libro nunca ha sido una tarea más asequible. Hoy en día existen todo tipo de leyes matemáticas y de baremos para poder determinar la rentabilidad de un libro y, además, conseguir que el autor pueda sacar una buena parte. Se deben ver las editoriales como socios dentro de este camino literario, que ponen todo su conocimiento y esfuerzo en que tu nombre esté en las librerías.
“Es un buen libro aquel que se abre con expectación y se cierra con provecho”.
Amos Bronson Alcott.
Además, en el caso de que optes por la autoedición siempre puedes imprimir tu libro con profesionales como Coollibri y hacer una promoción activa a través de presentaciones, videos y foros, para asegurarte de que tus lectores potenciales llegan a disfrutar de tu talento.
