Si estas dentro del mundo de la literatura y las editoriales o si estás pensando en escribir un libro, seguramente que más de una vez has oído hablar de unas famosas siglas y te habrás preguntado, ¿Qué es el ISBN? La respuesta es mucho más sencilla de lo que se crees.
Al igual que cualquier otro producto que se crea y se lanza al mercado, los libros cuentan con una legislación y regulación propia. Para poder editar un libro correctamente se necesita conocer este tema a fondo y es por eso que a continuación te vamos a contar qué es un ISBN, para qué sirve y cómo conseguir el tuyo para tu próxima publicación.
¿Qué es el ISBN?
El ISBN proviene del acrónimo International Standard Book Number y se creó como una forma de regularizar e identificar todos los libros que estuvieran en el mercado. Se trata de un código, originariamente de 10 dígitos, que sirve como número identificatorio de cada libro.
Con esto se debe entender que el ISBN no corresponde a un título, sino a todas las ediciones diferentes que se han hecho, priorizando el producto antes que la creación en sí. La aplicación de un ISBN no es obligatoria, pero sí es un recurso que facilita mucho la labor no solo de las editoriales, sino también de los distribuidores y libreros al poder localizar mejor un libro en específico y saber su stock.
¿Cómo saber el ISBN de un libro?
Cada libro, la mayoría de las veces, cuenta en la parte de atrás, o contraportada, y en la página con los datos editoriales con un código de barras que corresponde a su ISBN. Originalmente, este código estaba compuesto de 10 dígitos ordinales, no con numeración romana que, lejos de tener una función matemática, sirven de documento de identificación.
“Es verdad que el trabajo en una editorial impide conocer, paradójicamente, casi todo lo valioso que la literatura ha creado, lo que el tiempo ha sancionado y autorizado milagrosamente a permanecer más allá de su brevísimo instante que cada vez se hace más breve.”
Javier Marías
Desde hace ya algunos años ha pasado a tener trece dígitos. Estos trece dígitos tienen diferentes partes que hacen que el libro tenga su propia identificación. Estas partes son:
- Prefijo: lo componen los tres primeros números;
- Grupo de registro: dos cifras que determinan la zona geográfica;
- Elemento titular: cuatro dígitos que identifican la editorial;
- Elemento de publicación: tres dígitos que señalan el tipo de formato y edición;
- Dígito único de control: un digito final.
Para quién está diseñado el ISBN
Como decíamos, el ISBN no es algo obligatorio. Sin embargo, tanto los editores independientes como las grandes marcas, encuentran de mucha utilidad poder identificar de una forma global cada ejemplar que producen y aparecer en un motor de búsqueda.
«Publicamos nuestros libros para librarnos de ellos, para no pasar el resto de nuestras vidas corrigiendo borradores»
Jorge Luis Borges
Se debe tener en cuenta que su obligatoriedad está directamente relacionada con el fin que quiera darse. En el momento que se quiere editar un libro y publicarlo para obtener ganancias, debe estar registrado con su código y regularizado en la Agencia General Tributaria, para evitar riesgos.
A la hora de comenzar el proceso de asignación de los ISBNs, es normal que surjan dudas sobre quién debe ser el encargado de tramitar este código. La respuesta depende del tipo de edición que se esté realizando.
Si la edición de libros se lleva de la mano de una gran marca editorial o desde un editor profesional, será su labor asignarlo a cada libro que saque al mercado. Si por el contrario se elige autopublicar un libro, será el propio autor el encargado de registrarse en la Agencia del ISBN para formalizar y asignar su propio código y llevar registro de sus ejemplares.
Este código internacional está pensado, por tanto, para editores o autores que se enfrente a una gran carga de ejemplares, reediciones y títulos para poder tenerlos localizados y distribuirlos con mayor facilidad.
Libros electrónicos
Al igual que en los libros impresos, los formatos digitales también necesitan un código ISBN siempre y cuando se vaya a comercializar su uso. En casos bibliotecarios como el proyecto Gutenberg o de fuentes públicas como el Ministerio de Educación, donde los libros circulan libremente, el ISBN no sería necesario.
Sin embargo, si se va a querer lanzar a plataformas de e-market sí haría falta poder dotarle de un código que lo identifique y regule dentro del concepto del mundo multimedia y los metadatos.
¿Cómo se consigue un ISBN?
Conseguir asignar un ISBN no resulta tan fácil como parece. Para hacerlo se debe de realizar toda una serie de tramites y pagar los costos correspondientes de cada país. Para su tramitación hay que dirigirse a la Agencia Internacional de cada ciudad y solicitar comenzar con el proceso.
Los costos del ISBN dependen del lugar del mundo donde lo estés haciendo pero, orientativamente, en España tiene un precio alrededor de 45 euros que se deberán abonar a la hora de iniciar el trámite. Una vez realizado, se comenzará un proceso en el que se deberá identificar el tipo de libro que se quiere registrar y sus características.
A la hora de completar la asignación de ISBN, se deberán completar varios formularios en los que se especificarán los datos más concretos de la obra, como el género, subgéneros o la fecha de publicación. Cada aparatado está referenciado con una letra y permite localizar de forma más efectiva los diferentes tipos de publicaciones.
Una vez que se consigue obtener el ansiado código, la persona pasa a convertirse en autor y editor de su libro. Si lo haces a través de alguna agencia de Publishers o de editorial que quiera publicarte, este proceso es responsabilidad suya y no del autor.
¿Cuánto tiempo dura el ISBN de un libro?
Por norma general, todos los libros a los que se les ha asignado un ISBN, lo tendrán de forma indefinida sin necesidad e renovarlo, siendo un código que no caduca con el paso de los años. Sin embargo, se debe tener en cuenta que este identificador solo sirve para un tipo de publicación en concreto, teniendo que estar atento a nuevas ediciones y tomos.
Por ejemplo, si a un libro le va muy bien en ventas y supera las estadísticas de lectura y dinero, obteniendo buenas reseñas, lo lógico es que se saquen nuevas ediciones. Cada una de estos nuevos proyectos deberán tener su propio número de ISBN ya que cambia su estado.
Así mismo, el hecho de que un ISBN no caduque no quiere decir que su libro sí lo pueda llegar a hacer. Es común que, en libros antiguos o que no han conseguido los resultados que se esperaban, el identificador siga registrado en la base de datos pero ya no se comercialice o no quede stock en las imprentas y librerías.
¿Cuánto cuesta conseguir un ISBN?
Como decíamos anteriormente, el precio que hay que pagar por los ISBNs varían en función del país y de los presupuestos. Orientativamente, en España si quieres conseguir este código por tu cuenta, deberás abonar unos 45 euros.
Sin embargo, en ocasiones este precio va incluido dentro de los procesos de las grandes editoriales y, además se ahorra todo el papeleo que se requiere. Sin embargo, no hay que estar dentro de una gran agencia para poder facilitar todo el proceso de tramitación y gestión de derechos digitales.
También se puede optar por la autopublicación y utilizar plataformas que te agilicen y ayuden en este proceso de manera gratuita.
Cómo conseguir el ISBN gratis
En un mundo cada vez más tecnológico y globalizado, cada vez es más la gente que ha optado por sacar a delante ella misma su proyecto literario o editorial de la mano de plataformas de autoedición con las cuales han podido personalizar el proceso pero apoyándose en profesionales.
Algunas de ellas, como Coollibri se encargan de realizar todo el trámite de asignación de ISBN y depósito legal de manera gratuita si realizas la edición de tu libro. Solo debes asignar un proyecto y, después de imprimirlo, tendrás asignado de forma automática y gratuita tu ISBN para descargar.
La importancia del ISBN en la publicación de los libros
Si estás pensando en escribir un libro por primera vez, es lógico que te asalten decenas de dudas sobre cómo es el proceso. Crear un proyecto literario no es solo escribir un buen texto narrativo e imprimir el libro, también tiene toda una parte burocrática y legal detrás.
Por muy tedioso que pueda resultarte, estar actualizado sobre todos estos trámites, hará que tu futura obra esté mucho mejor identificada y pueda comercializarse para convertirse en un éxito de ventas hasta en las Agencias U.S. El código civil ha puesto a nuestra disposición todo tipo de herramientas para poder llevar a cabo un mapa mercantil más certero.
Por suerte, si todo esto resulta engorroso y lento de realizar, siempre puedes apoyarte en profesionales que de forma autónoma pueden asesorarte y hacer salir tu proyecto adelante.
