Todo el mundo en algún momento ha leído la sinopsis de una serie o película, ha empezado a verla y la ha dejado. ¿La razón? Aunque puede haber varias, la principal suele ser un guion deficiente que impedía conectar realmente con la trama. Para que esto no ocurra, quienes escriben una screenplay deben conocer las técnicas de escritura de guiones para cine y televisión.
Cada género o nicho literario tiene su cómo. Igual que no es lo mismo escribir un poema que un thriller psicológico, tampoco se puede comparar la escritura de un guion audiovisual con la escritura de un diálogo entre dos personajes novelescos.
Los guionistas tienen sus propias técnicas, reglas, necesidades y requerimientos, ya que su trabajo es esencial para el éxito del proyecto audiovisual en su conjunto.
Las bases de la escritura de guiones
Quien ha tenido un guion entre sus manos ha podido ver que es un texto con unas características muy concretas. Está conformado casi en su totalidad por diálogos, a excepción de las famosas acotaciones o anotaciones que el guionista hace para determinar aspectos de la acción, del tiempo o del lugar.
Más allá de la forma, su contenido también se estructura de una manera específica. Una manera que, aunque parezca increíble, es herencia de los griegos.
¿Qué estructura básica debe tener un guion para cine y televisión?
El guion se conforma según la estructura clásica de tres actos. Así lo definió Aristóteles en su Poética y así ha llegado a nuestros días.
Por ello, cuando hablamos de técnicas de escritura de guiones para cine y televisión, y a pesar del tiempo que ha pasado, no podemos olvidar las directrices aristotélicas. Es así como se asegura un desarrollo de la historia apto, entendible y organizado. Por supuesto, cada autor es libre de adaptar esa estructura a su idea para garantizar un arco narrativo adecuado para sus personajes y su argumento.
- Acto I: correspondería con la “introducción”, un término más usado en narrativa. En este primer acto se presenta a los personajes principales. También debe definirse la acción, es decir, aquello que mueve la trama.
- Acto II: una vez se ha producido el primer giro de guion o plot twist y se ha iniciado el conflicto, es momento de desarrollarlo. El protagonista (o los protagonistas, si hay más de uno) deben evolucionar con la trama, enfrentándose a desafíos para alcanzar su objetivo y cumplir la misión. Al final de este segundo acto, en el que puede incluirse alguna subtrama, debe producirse el clímax o momento de más tensión argumental.
- Acto III: los acontecimientos se precipitan hacia el final en el tercer acto, aunque siempre preservando la calidad, la relevancia y la coherencia. El protagonista debe enfrentarse al desafío final, consiguiendo su objetivo (si es una comedia) o fracasando (si es una tragedia). En cualquier caso, debe haber una resolución del conflicto.
Si piensas en cualquier serie o película que hayas visto, podrás comprobar que sigue esta estructura. Aunque en la Antigüedad Clásica la división en actos fuese más clara, con intermedios entre ellos, la estructura prevalece.
Para cada trama que quiera desarrollarse, debe seguirse esta técnica de escritura de guiones para cine y televisión. Incluso cuando hay que abordar la subtrama de un personaje secundario en menos escenas o tiempo de metraje, se utilizan los tres actos.
A un nivel más técnico, la estructura argumental de una película o serie (y también de cualquier otro programa de televisión), queda recogida en la escaleta. Este documento actúa como un índice, estableciendo qué escena o secuencia se grabará en cada momento y en qué lugar, ayudando así a organizar el trabajo y a tener una visión general de la trama.
Elementos indispensables en todo guion
Entendida la estructura en tres actos para el desarrollo de la historia, conviene entender cómo se escribe un guion. Con esto nos referimos a los elementos que forman parte de él y que dan sentido a la acción y a su contexto:
- Sinopsis (conocida como logline dentro del género cinematográfico) que permita entender la premisa de la película o serie (esto es especialmente importante cuando el guion se va a enviar a productoras para ser vendido, pero también para el equipo una vez se empieza a rodar).
- División en escenas o secuencias que ocurren en un mismo tiempo y espacio.
- Encabezado en cada escena con información precisa y concisa sobre el tiempo y el espacio (INT. SALÓN – MEDIODÍA)
- Acotación inicial, antes de introducir el diálogo, para describir la acción con más detalle (en qué posición se colocan los personajes, qué ambiente se respira, cómo está iluminado el espacio, cómo y qué enfoca la cámara…). Estas anotaciones no solo debe hacerlas el guionista, sino también el director de cine o de series.
- Intervenciones de cada personaje, introducidas por su nombre y acompañadas, si se requiere, de acotaciones para especificar movimientos, actitudes, tonos de voz, etc. Como es lógico, la construcción de buenos diálogos es la parte fundamental. Los personajes deben decir lo necesario, y los actores interpretarlo según acotaciones, para que el espectador entienda toda la acción y el desarrollo de personajes a través de las palabras, los gestos o los movimientos de cámara.
¿Por qué la necesidad de una metodología de escritura única? No olvidemos que el mundo audiovisual tiene sus propias reglas y que el guion debe ser un texto compartido entre todos los equipos y especialistas, desde el actor hasta el sonidista. Se trata, sin lugar a dudas, de un documento transmedia que va más allá de lo que los personajes dicen y que también debe definir, como hemos visto, aspectos de iluminación, grabación o atrezzo.
Por otro lado, el guion muchas veces es el resultado de una escritura colaborativa, de ahí que se tengan que respetar ciertas pautas comunes. Tras una primera versión en la que solo participa el guionista (o un equipo de guion), el director o incluso el productor hacen una reescritura del texto para llegar a una versión definitiva que incluya todas las señalizaciones necesarias para el rodaje.
¿Cómo diferenciar la escritura de guiones para cine y para TV?
Dentro de lo audiovisual, no hay muchas diferencias en cuanto a las técnicas de escritura de guiones para cine y televisión. De hecho, muchas veces escuchamos eso de que algunas series podrían haber sido una peli, o algunas pelis, una serie.
No obstante, sí que hay algunas características propias de cada medio. Para empezar, resulta evidente que el guion de una película empieza y acaba en sí mismo. Mientras, las series y programas de televisión se dividen en episodios y, muchas veces, cada uno de los actos clásicos puede extenderse en varios guiones.
Por otro lado, en los guiones de las series suele ser más común incluir lo que se llama “character list” y “location list”. En la primera se especifica qué personajes y qué actores aparecerán en ese episodio, y en la segunda, qué escenografías se usarán. Puede darse el caso de que estas páginas extra no estén. Esto es muy frecuente cuando es el guion de un episodio piloto que se incluye como pitch para que un showrunner lo compre y lo produzca, por lo que aún no hay especificaciones de actores o escenarios conocidos.
Piensa, por ejemplo, en la famosa serie Friends. No en todos los episodios aparecían todos los personajes secundarios, así que se especificaba cuáles estaban “llamados” y también en qué lugares se grabaría (apartamento de las chicas, de los chicos, la cafetería, la lavandería…). Esto es importante para organizar los equipos y optimizar tiempos de grabaciones, algo fundamental al tener que cumplir con los plazos de emisión.
¿Qué herramientas pueden ayudar a los guionistas a ser más eficientes?
Por suerte para los guionistas, en la actualidad existen diversas plataformas y herramientas que ayudan a aplicar las técnicas de escritura de guiones para cine y televisión.
Como es lógico, y como vamos a comprobar, son más que procesadores de texto, pues lo que prometen es ayudarte a dar forma al texto para que, una vez completado, sea un guion en toda regla. Esto es imprescindible para que luego otros departamentos puedan leerlo y entenderlo.
Software y recursos esenciales para la escritura de guiones de cine y televisión
Incluso los grandes guionistas utilizan las siguientes plataformas, que les ayudan no tanto a escribir, sino a crear el guion según las directrices y técnicas de escritura de guiones para cine y televisión. Con esto nos referimos a respetar las normas de estilo y forma, pero también a establecer cuáles son y dónde están los diferentes plots o tramas.
Final Draft
Esta plataforma forma parte del día a día de los guionistas de cadenas y productoras tan conocidas como la BBC, Sony o Netflix. Su uso está, por lo tanto, muy extendido, y también su fiabilidad y reputación.
La gran ventaja de esta herramienta es que actúa como un segundo screenwriter que formatea el texto para darle el aspecto que debe tener. Así, promete que el guionista no tendrá que estar pendiente de escribir los nombres en mayúsculas, añadir márgenes… Su sistema se encarga de ello para que tú solo tengas que escribir. Por ejemplo, Sofia Coppola, que usó esta plataforma para el screenplay de Priscilla, lo expresaba así: “Final Draft hace todo mucho más sencillo – además de que te motiva porque lo que vas escribiendo realmente parece un guion”.
Sin embargo, este software tiene otros beneficios:
- Facilita la escritura colaborativa entre un equipo de guionistas.
- Se utiliza a nivel global y la mayoría de profesionales del ámbito audiovisual lo usan y están familiarizados con él.
- Incluye plantillas que, según qué género cinematográfico estés escribiendo (sitcom, drama, musical…), puedes usar para seguir un esquema.
- Facilita la conversión de la llamada “beat sheet” (es decir, un esbozo de la trama) a un primer borrador de guion.
- Ayuda en la creación de otros documentos adicionales como el story board o guion gráfico.
La desventaja, como era de esperar teniendo en cuenta lo potente que es Final Draft, es que sus precios no siempre son asequibles, especialmente para guionistas que están empezando.
Highland 2
Sabiendo que ciertos software de guion no eran accesibles para todo el mundo, el guionista John August creó Highland 2 y lo hizo gratuito.
Igual que Final Draft, automatiza el formateo del texto para que cumpla con los estándares que lo hacen profesional. Por ejemplo, si se escribe el nombre de un personaje en mayúsculas, el sistema detecta que es el inicio de una intervención e introduce el margen y los espacios necesarios.
Estos son otros aspectos que facilita:
- Permite guardar textos alternativos en forma de notas bien organizadas, por si quisieses utilizarlas o tenerlas en cuenta más adelante.
- Crea y hace accesible un “mapa” de tu guion para que puedas moverte ágilmente entre secuencias y escenas.
- Analiza el equilibrio entre personajes femeninos y masculinos y qué tratamiento se hace de ellos, una funcionalidad muy novedosa e interesante.
Trelby
Si estás empezando en la escritura de guiones, Trelby es una plataforma que puede ayudarte en esas primeras etapas. Su interfaz es muy sencilla y puede resultar menos abrumadora que otras más avanzadas.
Además, también resulta interesante por otros factores:
- Mantiene el mismo aspecto se use en el dispositivo en el que se use.
- Permite comparar varias versiones de un mismo guion para comprobar cambios y si estos han sido a mejor.
- Analiza qué escenarios, lugares o personajes aparecen más o menos.
Casualty
Si como guionista eres muy visual o desde el primer momento pones en marcha una escritura colaborativa con otros departamentos, Casualty es un software que debes considerar.
Su gran diferencia es que facilita la visualización de la estructura secuencial del guion. Según se escribe, se crea una línea del tiempo. Además, obliga a añadir los máximos detalles para asegurar que todos los elementos del argumento guardan coherencia entre sí.
Aunque el precio es algo elevado, dispone de otros beneficios:
- Favorece la escritura y visualización de los arcos narrativos, el ritmo y los giros de guion.
- Incluye herramientas para desarrollar personajes creíbles y definir aspectos como cuál es la relación entre ellos.
Técnicas de escritura creativa de guiones para cine y televisión
Aunque las herramientas que hemos mencionado ayudan en el proceso de escribir un guion, en ocasiones llega el bloqueo de escritor. O simplemente se necesita un impulso para dar rienda suelta a las ideas y desarrollar diálogos con eficiencia.
En esos casos, se pueden poner en práctica ejercicios y técnicas de escritura creativa de guiones para cine y televisión. Son, en definitiva, actividades que se enseñan en cualquier taller de guion y que ya han ayudado a múltiples screenwriters.
- Mantén conversaciones con tus personajes y entre ellos, llegando incluso a interpretarlas (cambiando la voz, haciendo los gestos que harían…). Tener en tu mente cómo o de qué hablan es fundamental para llevarlos luego al papel.
- Solicita, busca o coge de otros guiones la sinopsis o logline, o incluso el primer encabezamiento de tiempo y lugar (por ejemplo INT. CAFETERÍA – NOCHE) y empieza a desarrollar un diálogo desde ahí, dejando que los personajes vayan tomando vida sin haberlos definido previamente.
- Escribe el guion de una escena cotidiana (o de una escena que acabes de ver en la vida real). Incluye las acotaciones e intervenciones necesarias para que luego esa escena pudiese rodarse y resultar igual.
- Escoge una de tus escenas favoritas de una película y haz una reescritura completa de esta. O simplemente cambia la descripción de los personajes y haz que cambie también su diálogo (por ejemplo, una escena de Harry Potter en la que Ron tiene la personalidad de Hermione, y viceversa).
- Dibuja a modo story board la película, y luego escríbela.
- Coge el guion de un cortometraje y transfórmalo en el guion de un largo, o al revés.
- Cambia el género cinematográfico de una película (por ejemplo, cambia una comedia a una tragedia) y escribe un nuevo guion para ello.
¿Qué se puede aprender de los guiones exitosos y de los errores comunes?
Otra manera de practicar la escritura de guiones es analizar algunos que ya están escritos, una actividad que también se pone en práctica en talleres de guion. Esto es posible porque muchos guiones de series y películas famosas han sido publicados en su totalidad o, al menos, algunos fragmentos.
¿Qué podemos aprender de ellos? Para empezar, debemos entender que la versión que nos llega es definitiva y que es el resultado de muchas correcciones y ensayos llevadas a cabo por personas con años de experiencia en el sector. No obstante, y aunque los errores sean mínimos, sí podemos observar qué se hizo bien o qué técnicas de escritura de guiones para cine y televisión se utilizaron.
Pretty Woman de J. F. Lawton
A pesar de poder parecer una película con un argumento sencillo, el guion construye unos personajes complejos.
Así, destaca el personaje de Vivian y cómo su manera de ser y hablar evoluciona a lo largo de la película. El guion es el motor para que ese arco narrativo se dé. Vivian comienza caracterizándose por un discurso hasta cierto punto vulgar, aunque va cambiando y pareciéndose cada vez más al de Edward. Esto el guion no lo muestra solo como un proceso de culturización, sino que representa cómo ambos personajes no son en el fondo tan diferentes.
Por lo tanto, en este film se ve cómo lo que dicen los personajes no es solo un texto, sino también un subtexto, pues el guion debe ser capaz de dar un significado mucho más profundo a la acción.
Dolor y Gloria de Pedro Almodóvar
Si algo han destacado las actrices y actores que han trabajado con Pedro Almodóvar, ha sido el detalle con el que escribe las acotaciones. Muchos de sus guiones, de hecho, han sido publicados a modo de novela.
Almodóvar decía que él siempre quiso ser escritor, aunque una cámara se cruzó en su camino y sus sueños cambiaron. Sin embargo, ese espíritu de narrar nunca lo abandonó.
La precisión que forma parte de su técnica de escritura de guiones para cine y televisión, puede que sea también consecuencia de su otra faceta como director de actores. Dando la máxima importancia a las acotaciones, Almodóvar empieza ya a dirigir al reparto y a visualizar cada escena.
En la publicación del libro-guion de Dolor y Gloria, se puede observar cómo las acotaciones son extensas, ocupando incluso varios párrafos. Además, el texto se acompaña de imágenes de la película y del story board, lo que permite ver más claro cómo lo escrito se convierte en visual.
Interstellar de Christopher Nolan
La fama de Nolan le precede, y también la dificultad de los temas que trata en algunos de sus guiones. No obstante, estos no siempre son redondos.
En el guion de Interstellar, por ejemplo, muchos físicos reconocen errores. Esto suele ocurrir cuando un autor decide escribir y crear una película sobre hechos reales o que no salen totalmente de su imaginación.
Como guionista, ser consciente de esos fallos es importante no solo para no cometerlos, sino para, si se cometen, hacerlo con la justificación de que son licencias poéticas. En cualquier proceso de investigación previa a la escritura, debe buscarse el máximo rigor, pero a veces también hay que tomarse libertades creativas para que ciertos aspectos de la película tengan sentido en la pantalla.
La red social de Aaron Sorkin
Este film resulta perfecto para entender lo efectiva que es la estructura en tres actos. Si has visto la película, o si estudias su guion, podrás comprobar rápidamente que se divide en tres partes, entre las cuales hay puntos de inflexión de máxima tensión que generan el cambio entre una y otra.
Más allá de la estructura, no podemos no mencionar la frescura de las intervenciones de los personajes. Esto resulta lógico, pues los protagonistas son jóvenes y su contexto y sus acciones (crear el famoso Facebook en un entorno de negocios, acuerdos y traiciones), exigen ese dinamismo.
El arte de escribir un guion audiovisual
A lo largo de este artículo hemos visto cómo el mundo audiovisual tiene sus propios requerimientos, lo que exige utilizar una serie de técnicas de escritura de guiones para cine y televisión.
Entre ellas destacan el respetar unos parámetros formales, incluir acotaciones y lograr que las intervenciones hablen por sí solas, haciendo evolucionar a los personajes y a la trama.
Afortunadamente, existen una gran variedad de herramientas y recursos que hacen más fácil la tarea de los guionistas. Desde software de escritura, hasta guiones publicados con los que aprender de los grandes.
Siguiendo los consejos que hemos dado en este artículo, y practicando la escritura dentro de este género, podrás lograr un guion redondo tanto sobre el papel como en la pantalla. Cuando lo tengas listo, no olvides imprimirlo en buena calidad para empezar a enviarlo y lograr así producirlo y distribuirlo.